28-06-2018
Tener un perro medio tiene un efecto sobre el clima mayor que conducir un todoterreno. La huella ecológica de los perros y gatos del Estado Español es mayor que la superficie de Extremadura.
Muchos de nosotros mantenemos relaciones emocionales con una mascota y numerosos estudios demuestran efectos beneficiosos de su compañía sobre nuestra salud física y mental. Pero para el planeta la cosa es muy distinta. 1/3 de la superficie agrícola del mundo se dedica a la producción de alimentos para los animales de granja. Buena parte de la carne de estos animales se utiliza en los países ricos para alimentar a perros y gatos. Se da la paradoja de que cuidar de un perro repercute sobre el clima más que conducir un 4x4.
Según Robert y Brenda Vale (Universidad de Victoria, Nueva Zelanda), un perro medio consume unos 300g/día de pienso seco. Esto equivale a 450g de carne fresca y 260g de cereales, lo que supone 164 kg/año de carne y 95kg/año de cereales. Se necesitan 43,3 m2 de tierra fértil para producir un kg de pollo (muchísimo más si se trata de carne de cerdo o ternera) y 13,4 m2/kg de cereal, lo que supone aproximadamente 8400 m2, o 0,84 hectáreas (ha). En el caso de un gato serían 0,15 ha. La huella ecológica de un Toyota Land Cruiser que realizara 10.000 km/año sería de 0,41 hectáreas. Más impresionante es aún compararlo con la huella ecológica de la alimentación de un vietnamita, 0,76 ha; o 0,67 ha, en caso de un etíope.
En España viven más de 5,2 millones de perros y 2,2 gatos. Su huella ecológica al aplicar los datos anteriores supondría una superficie mayor que Extremadura.
Si consideráramos a los gatos y perros de EEUU como si fueran un país sería el 5º en consumo de carne del mundo, después de EEUU, China, Brasil y Rusia. El volumen de carne que comen perros y gatos americanos podría alimentar a los 26 millones de vaqueros. Por su mantenimiento, con cálculos de Gregory Okin (UCLA), se emiten 64 millones de Tm de CO2/año, consumiendo 1/5 de las calorías del país, más que todos los ciudadanos franceses. Generan 5,1 millones de Tm/años de heces equivalente a los 6,8 millones de habitantes de Massachussets.
En todos los datos mencionados no se han tenido en cuenta otras repercusiones sobre el clima como la desertificación, consumo de agua, envenenamiento por pesticidas...
Para recoger las heces de perro los propietarios utilizan millones de bolsas de polietileno desechables cada día, que tardarán 150 años en descomponerse.
Este problema se incrementará con el desarrollo económico de China, India o Brasil y el incremento de mascotas asociado. Sería deseable sustituir gatos y perros por herbívoros como animales de compañía.
Más información:
Las mascotas también amenazan el clima
https://www.ecoavant.com/sostenibilidad/las-mascotas-tambien-amenazan-el-clima_3591_102.html
El impacto ambiental de las mascotas
