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Plaza en homenaje a las mujeres del distrito y en su lucha por el derecho a la igualdad y la no discriminación, la mejora de la calidad de vida y la cohesión social. Es una de las intervenciones que el Ayuntamiento lleva a cabo para hacer visible la presencia de las mujeres en la vida pública y social de Nou Barris. De hecho, la plaza es fruto de la colaboración directa entre el Gobierno del Distrito y las mujeres de Roquetes en todas las fases del proyecto, desde el diseño del entorno hasta la elección del nombre, que ha sido escogido por las propias vecinas del barrio.

Contiene un gran espacio verde con un itinerario adaptado para personas con movilidad reducida. En la zona verde se han plantado árboles y plantas arbustivas, y se ha colocado mobiliario urbano que facilita la estancia de los usuarios en una zona del barrio deficitaria de espacios públicos y zonas de comunicación social entre vecinos. Además, hay una zona de juegos infantiles adaptada, y se ha instalado riego automático y alumbrado público tipo led. El objectivo es enlazar y crear una continuidad entre el parque del Pla de Fornells y los equipamientos adyacentes, situados en la parte alta del barrio, y el eje cívico del entorno del mercado de Montserrat.

La zona verde se estructurará en varios caminos que delimitan unos parterres ajardinados con árboles y plantas arbustivas que comunican, a través de un itinerario adaptado, el desnivel existente entre la parte alta y baja del ámbito.
El arbolado consta de arces y tilos acompañados de almeces y tipuanas en las zonas más soleadas. También hay especies arbustivas en las zonas de parterres, y en las zonas de muro y de desnivel viña vírgen que se adapta perfectamente al entorno.
En esta plaza se ha instalado un Sistema Urbano de Drenaje Sostenible (SUDS). Con esta actuación se ha conseguido la captación del 100% de las aguas pluviales de un periodo de retorno de 10 años (una lluvia torrencial fuerte) en una calle que tiene una gran pendiente longitudinal del 12%. Se basa en colocar áreas de bioretención entre la calzada y la acera. Las primeras aguas se paran en estas áreas vegetadas donde se retienen los contaminantes. Cuando el caudal comienza a ser elevado, entran en un dispositivo de estructuras vacías de polietileno que permiten la infiltración en función de la capacidad de permeabilidad del terreno. Esta alternativa sostenible es extrapolable a otras calles y en otras ciudades.
Las estructuras son modulares de polipropileno reciclado y sirven para crear espacios vacíos de diferentes formas y prestaciones situadas bajo o en el interior de materiales permeables destinadas a captar el agua filtrada a través de estos materiales porosos y aumentar su capacidad de acumulación. El objetivo es reducir las superficies impermeables de la ciudad, aumentar las permeables y recuperar la capacidad de filtrar, retener y acumular agua de lluvia.